Cuando nuestros hijos se enferman es lo peor del mundo que puede llegar a pasarnos, uno se siente impotente y solo deseas que se recupere lo antes posible cueste lo que cueste.
Así le sucedió a Maddalena Saunders cuando su hijo Tyler de 6 años de edad, el niño comenzó a sentir dolores causados por un eccema, los médicos no le prestaron la atención que el niño requería debido a que le dolía todo el cuerpo.
La madre angustiada por lo que ocurría de que no atendían a su hijo como se debía, tomó la iniciativa de buscar ayuda. Maddalena quiso contar su historia para ayudar a otros padres que estén en una situación parecida. Tyler solo tenía 6 años cuando le apareció el brote de eccema, a medida que pasaba el tiempo fue empeorando cada vez más hasta llegar al punto que no podía dormir y lloraba cada día debido a sus grandes heridas en la piel. Los médicos no entendían porque nunca llegaron a ver el estado del niño, la madre decidió grabar el llanto desgarrador de Tyler, pero nunca llegó a servir.
A la final decidió buscar ella misma la solución, vio un publicado en Facebook de un dermatólogo de Sudáfrica. Al principio no creía mucho pero de igual forma pensó que no perdería nada con intentarlo. Decidió comprar la crema del dermatólogo Richard Arons y ocurrió todo lo que el médico decía. Le echó la crema al niño por el cuerpo y todo comenzó a cambiar quedando el niño sin el eccema.
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